En medio de una pandemia es un poco difícil conseguir libros nuevos, todas las librerías de mi ciudad están cerradas, he pedido a Gandhi pero aún no llegan. Y les confieso algo: yo no puedo estar un día sin leer, siento que algo me falta si no tengo un libro cerca.
Justo por esa razón, siempre que voy al super, me doy una vuelta por la pequeña zona de libros de Gandhi (solo está en Walmart), para tener una “reserva” de libros en lo que llegan los que pido, y justo ahí fue donde encontré este.
¿Saben? Nunca había recibido taaantos comentarios de un libro, me di cuenta que muchas personas lo aman, eso me dio demasiada curiosidad, así que me piqué y lo terminé en un fin de semana.
No puedo decir que es mi historia de amor favorita porque ese puesto aún lo ocupa “Orgullo y Prejuicio” de Jane Austen pero sí me robó algunos suspiros, principalmente me hizo recordar todas las emociones que descubres cuando por primera vez te gusta un niño/niña de tu salón, o las cosquillas que invaden todo tu cuerpo cuando tienes tu primer novio/novia y se toman de la mano y lo que significa que tu mundo dé un giro de 360 grados cuando llega el primer beso.
Resalto y celebro que la autora habla sin tapujos de lo que el bullying puede causar en la vida de una persona, en verdad yo sufría al leer los ataques de violencia escolar que se vivían constantemente en el colegio de Eleanor y Park. De hecho, hay uno en especial (el último que vivió Eleanor, de las toallas sanitarias) que me pareció sumamente indignante, incluso lleva un perjuicio basado en estereotipos de género, porque sí, la violencia en las aulas muchas veces también es violencia de género; se da en formas como las que experimenta Eleanor o como acoso sexual. Asimismo sentía impotencia al leer la historia de violencia familiar en la que estaba inmersa Eleanor, pero de eso hablaré más a detalle.
En verdad me hizo pensar que en todas las escuelas debería existir mayor supervisión para poder identificar a quienes cometan actos de violencia escolar tan extremos, porque no solo le hacen daño a las víctimas, también es una gran alarma de la triste realidad que están experimentando las y los jóvenes que violentan, ellos y ellas también necesitan ayuda, en el bullying nadie gana y todas y todos perdemos.
Toca también el tema de la xenofobia, el racismo y la discriminación hacia las y los migrantes, en especial lo que experimentan Park y su mamá, al ser de origen asiático.
En resumen, con Eleanor & Park vivirás de cerca la historia de amor de dos jóvenes con experiencias de vida difíciles y diferentes pero que los unió un autobús, un colegio, un vecindario, la música, los comics de súper héroes y el bullying que ambos experimentaban, ya sea por separado o estando juntos.
Algo que no me gustó son los mensajes negativos que constantemente lanza la autora, sobre todo porque este libro lo leen miles de jóvenes en todo el mundo; le da demasiado significado al peso de Eleanor, manifestando que no importa lo que ella haga, siempre será “gorda”. Eso no ayuda en la construcción de autoestima de las jóvenes. Tampoco abona a la lucha que hemos emprendido las feministas para que dejen de fiscalizar nuestros cuerpos. Lo matiza un poco cuando argumenta que a Eleanor no le gustaba maquillarse porque sentía que “mentía”, disfrutaba de su belleza natural.
Tampoco me gusta que utiliza algunos insultos sexistas como por ejemplo “eres una niñita”, estamos en el siglo XXI, en verdad tenemos la responsabilidad de desterrar ese tipo de expresiones llenas de misoginia. No pueden quedar plasmadas en un libro, en una sociedad cada vez más incluyente, despierta e igualitaria. Creo que si un adolescente dentro de 20 años lee eso, ni siquiera podrá comprender por qué alguien se atrevía a decirlo, algo así como cuando una niña hoy no comprende por qué antes las mujeres no podíamos ir a la Universidad.
Pero volviendo a la historia, lo que el amor causaba en Eleanor, sí te da esperanza. El llegar a sentir que el mundo es el lugar más feliz, seguro y que te rodea un campo de fuerza cuando estás con tu loved one es una de la sensaciones más hermosas que puedes llegar a sentir, no aceptes nada más hasta que no llegues a sentir eso.
La forma en como dividió el libro me gusta, es diferente y facilita su lectura, está en capítulos que a su vez va subdividiendo con los nombres de la y el protagonista, de repente nos relata lo que está viviendo y pensando Park y luego pasa a Eleanor y así sucesivamente, tiene 424 páginas.
Quiero regresar a la violencia familiar que experimentaba Eleanor en casa, en verdad su padrastro Richie era un hombre tan misógino y machista que debe pagar por su violencia, me encantaría haber visto eso en el final, para mandar un mensaje contundente a las y los miles de lectores, ese hombre cometió graves delitos y debe pagar por ellos.
Para concluir, me encantó que Rowell nos enseña que los amores profundos no solo se dan por “un primer flechazo”, también pueden surgir de la conexión cuando dos personas conviven de cerca, conocen sus gustos de música, sus comics y libros favoritos, sus metas, sus sueños, su carácter, su forma de pensar, hasta que llega ese primer y espontáneo beso que los une para siempre.
Pd. 1: Eleanor era fan de Los Beatles, si tú también lo eres te vas a emocionar.
Pd. 2: Con el final se te antoja una segunda parte ¡esto no puede quedar así!
Espero hayas disfrutado mi reseña, como siempre, gracias por leer.
Con amor, Yuli.
Frases favoritas
- Sólo hay uno como él
- Tendría que guardar aquel beso para siempre
- No era su novio, era un superhéroe
- Nada termina nunca
Tenía rato de no pasar a leerte, creo que en casi todas tus reseñas ya comenté, y faltaba esta, no entendí a profundidad tanto como en otras entregas, está más resumido en esta, el acoso escolar es horrible, tuve que amoldarme a una basta lista de apodos, siempre he sido muy delgado, e iban desde, jirafa, calavera, tren parado, fémur, por mis piernas muy delgadas no me ponía short, me refugiaba en otras actividades, le hice frente a muchas de las ofensas y como era de esperarse hasta allá volaba literal, ya me levantaba todo revolcado, aunque con la consiga de haber luchado por mi dignidad me hacía seguir, a pesar de las risas y burlas de otros, desde e…